miércoles, 31 de octubre de 2018

472.- RESUMEN DE OCTUBRE.


No estaba yo muy convencida, cuando el mes pasado publiqué el resumen de septiembre aquí, de repetir en octubre.

Pero aquí estoy, manos en el teclado, para resumir mi mes de octubre.

Octubre es mi mes preferido de todo el año, y eso porque en nuestro hemisferio, octubre es el comienzo del otoño. 

Comienza por fin el tiempo de llevar medias, pañuelos y botas. Las mantas en el sofá, las siestas con edredón, los tés calentitos y la lluvia desde la ventana.

En el aspecto personal, pocas cosas han cambiado. Sigo a la espera de recibir mis pertenencias, que siguen en Barcelona. Pero ya queda menos y no me supone una gran preocupación. 

He visto, después de más de seis años, a una persona que sigue siendo muy importante en mi vida, porque compartimos 14 años y me hizo feliz. Mucho.

También este mes ha sido el de mi postal. Esther, del blog El Anafre, que os recomiendo mucho mucho, me ha enviado una postal preciosa de una obra del pintor Egon Schiele, que se trajo de su viaje a Viena, desde el museo Belvedere. Me ha encantado.

En breve recibirá la mía. He tenido algunos problemillas logísticos.

En cuanto al blog, he sido muy productiva, me despisté un poquito en la tercera semana, pero me he vuelto a poner al día.

A continuación os dejo un breve resumen de los que han sido mis post's de este mes, por si os habéis perdido alguno, o si os apetece volver a leer otros.

458.- PRECARIEDAD. Sobre la situación económica, social y laboral en España. Y la necesidad de un cambio estructural profundo.



459.- EL TAMAÑO DE LAS BOTELLAS. Los curiosos nombres de las botellas de vino según su capacidad. 
Muy útil, de cara a las próximas festividades.


460.- LOS VIERNES UN CÓCTEL  Otra opción de cara a las fiestas, o simplemente para cuando nos apetezca. La mixología es complicada y gratificante.


461.- COCINAR CON CALABAZAS. Otoño y calabazas están íntimamente unidos. Dejo aquí unas recetas ricas para quedar muy bien.


462.- EL EGOÍSMO DEL DOLOR. Victimismo y tonterías varias.


463.- SERIES. SOMEWHERE BETWEEN. Una serie completamente recomendable.
La utópica posibilidad de cambiar nuestro pasado, para arreglar nuestro presente.


464.- SI. Aprender a quereros y a valorarnos mucho, para poder querer a otras.
No nos dejemos maltratar nunca.


465.- RESTAURANTE GRAN D'ITALIA Y CAFÉ DEL MAR. Comentario sobre un restaurante italiano y un local de copas.
Un sábado estupendo con una de mis hijas. 


466.- CELEBRACIÓN. NUEVA ETAPA. Porque siempre tenemos algo que celebrar. Más o menos importante, pero siempre hay que celebrarlo.


467.- SERIES. BROADCHURC. Otra serie que recomiendo que veáis. Muy buena.


468.- HIERRO. Algo tan simple y complejo a la vez. Ha significado mucho en mi vida y lo sigue haciendo.


469.- SERIES. LA MALDICIÓN DE HILL HOUSE. Estupenda serie de terror basada en una novela de Shirley Jackson. Si os gusta el género, os la recomiendo mucho.


470.- CASTAÑA- Al igual que la calabaza, la castaña es totalmente otoñal. Muchos recuerdos castañeros que me hacen sonreír, e incluso con los que se me escapa alguna lágrima. O muchas. 


471.- LUNES. Son un asco. Y lo sabemos. Y me da igual que alguna absurda me diga que es el día de la semana que prefiere. Porque es mentira.


También me ha dado el mes para reconocer la estulticia más aguda, la consciente falta de empatía, el victimismo de quien se pincha con una astilla y la autosatisfacción en la propia ignorancia  (es redundancia, pero lo hago para enfatizar). Todo ello cubierto con el peligroso velo de la irresponsabilidad.

 Y eso me hace sentir fuerte. Mucho. No puedo evitarlo. 

También tengo nuevas lectoras, a las que les agradezco que me lean con tanto entusiasmo. Dejadme comentarios y opiniones. Eso ya sería lo más.

Y esto ha sido un esbozo de mi octubre. 

Ahora ya casi en noviembre, espero resultados.


lunes, 29 de octubre de 2018

471.- LUNES.

No me gustan los lunes. Nada.

Nunca me gustaron. Ni cuando trabajaba los lunes ni cuando no trabajaba los lunes.

                  


Los lunes son días en los que la mala leche, la antipatía, el mal humor, el descontento y la desilusión, parecen desparramarse por los muros, por los edificios, los árboles, el césped de los parques, las marquesinas de las paradas de autobuses, las estaciones de tren, las salas de espera de las médicas y de las abogadas.

Hasta el cielo más azul y el mar más transparente, se cubren de esa lechosidad del lunes, que hasta huele a cuajo.

Son un asco los lunes.

Y no hay más.

                                     




sábado, 27 de octubre de 2018

470.- CASTAÑA.


De pequeña, en Las Palmas de Gran Canaria, había puestos de castañeras que vendían castañas asadas, comenzaba la temporada a final de octubre y se prolongaba hasta la Navidad, Fin de Año y Reyes. Estaban, por lo que yo recuerdo, en la zona de Triana y Parque de San Telmo. Y allí solíamos ir mi hermana y yo de paseo con mis abuelos.

Mi abuela también las preparaba en casa, cociéndolas en agua con matalauva (anises), estaban muy ricas.
Más tarde, cuando me fui a vivir a París, probé el Marron Glacé, castañas glaseadas. Un dulce muy francés y reconocido como una delicatessen muy gourmet. A mi me encantan.

Al volver a Canarias y ya casada, era costumbre insalvable, que mi madre me regalara por Navidad un bote de Marron Glacé de Cuevas. Buenísimas. Y mi amor de entonces, de siempre, también me las compraba, para darme sorpresas de esas que nos gustaban a los dos.


Con las niñas y los niños ya en el colegio, organizaban una fiesta a final de octubre, La Castañada, en la que nos reuníamos muchas familias y preparábamos entre todas un picnic y acabábamos con castañas asadas.

Entonces conocí la crema de castañas, con la que preparé algún pavo, perdíz y codorníz rellenos.
Después con mi novia vasca de muchos y bonitos años, recuerdo haberlas comido alguna vez por tierras de Euskadi interior, y también algún Marron Glacé de regalo inesperado con mucho amor. Y también recuerdo de aquella época el helado de Marron Glacé de "Los Alicantinos".

Durante mis seis años en Barcelona, me reencontré con la figura de la castañera, en la plaza que hay delante de la catedral. Y comprar una sartén llena de agujeros, que yo no había visto en mi vida, para poder asar las castañas en casa. Eran días de calor, globos y mucho amor.







Y ahora de vuelta a Canarias, estoy pensando en comprarlas y prepararlas todos juntos. Porque como me dijo un día mi hija mayor. Tenemos que seguir generando bonitos recuerdos. Y lo hacemos y seguiremos haciéndolo.

La vida no es una castaña.Vamos a comérnoslas.


viernes, 26 de octubre de 2018

469.- SERIES. LA MALDICIÓN DE HILL HOUSE.


Que me encantan las películas y las series de terror no es nuevo aquí. Y por eso, muchas veces me llevo grandes desilusiones, como la que os conté aquí, con la película La Monja.

Gracias a Netflix, he podido ver la serie "La Maldición de Hill House". Basada en la novela del mismo nombre, escrita por Shirley Jackson y publicada en 1959.



Da miedo, sobre todo los primeros capítulos, después te acostumbras y vas habituándote a los fantasmas. Como en la vida real, vamos.

Una familia de siete personas, una casa encantada y ya tenemos serie. Se han hecho muchas películas y series con estas premisas, y no siempre ha salido bien. Todo lo contrario, suele salir mal. Desde Amityville ha llovido mucho y sólo puedo destacar la primera temporada de American Horror Story, en cuanto a familias con viviendas extrañas.


Pero en esta serie, pues no lo han hecho mal del todo. Si os gusta el género y pensáis pasar el próximo fin de semana en casa, preparando Halloween, el día de los muertos, tortillas de calabaza, buñuelos, panellets, la castañada o lo que sea. Pues os la recomiendo.

Es entretenida con sobresaltos incluidos. 

Y si os ponéis intensitas, pues os hará pensar en la realidad de lo sobrenatural y la corta o larga distancia hasta la esquizofrenia.

Bueno, hasta aquí hoy. Feliz fin de semana y a disfrutar el viernes, que el cuerpo lo sabe.






jueves, 25 de octubre de 2018

468.- HIERRO.


El hierro es un metal que no suele estar presente en nuestro pensamiento ni en nuestro imaginario cotidiano.

El hierro es un metal que está muy presente en nuestra vida, en lo cotidiano, es omnipresente.

Edificios, puentes, carreteras, coches, ferrocarriles, casas, parques. Cualquier tipo de construcción.

Todas llevan hierro en su interior, es lo que fija el hormigón, y permite que se sostengan.


Conozco este material hace tantísimos años. Treinta y cuatro años de atados de varillas de doce metros, de hierro corrugado para la ferralla, que después se utiliza en la construcción.

El hierro es, las tripas de cualquier construcción.

Dicho así, se diría que no tiene esto ningún encanto.

Pues nada que ver.

Muchas sesiones de fotografías de moda se hacen en talleres de ferralla y almacenes de hierro.


Y desde hace unos pocos años, comienza a utilizarse el hierro en varillas, corrugado, para la elaboración de muebles, que les otorga un carácter industrial y acogedor, cuando se mezcla con maderas recicladas.


Fuerte, resistente, y aunque la oxidación esté presente, cuando queda en el interior de las construcciones, invisible, esa oxidación se detiene y las mantiene inamovibles.

El hierro es como tú, y aunque ya no podamos verte, sigues manteniéndonos fuertes, firmes y unidos. Porque te llevamos dentro.











viernes, 19 de octubre de 2018

467.- SERIES. BROADCHURCH.


Recomendadísima.

Tres temporadas en las que no decae la intriga.

Serie británica que se encuadra en el "Domestic Noir", estilo del que ya os hablé aquí. Y del que muy pronto volveré a escribir, porque está muy de moda en novelas, series y películas. 


Y desgraciadamente también en la vida real. Qué no es algo nuevo, lo que ocurre es que antes se escondía, dando lugar a enormes tragedias y dramas personales y familiares. Y se enquistaban peligrosos mitos familiares.

Volviendo a la serie, estupendos protagonistas, David Tennant y Olivia Colman. Y también el resto del reparto.

Muy buena fotografía, a la que ayuda enormemente las localizaciones. Preciosos paisajes costeros con impresionantes acantilados y la siempre hermosa campiña inglesa.

Voy a resaltar algo que me ha resultado muy agradable y que no sé si está hecho a propósito, o si en el mejor de los casos, se trata de algo que los productores de la serie han hecho sin intención.


Muchas mujeres, todas mujeres auténticas, niñas, adolescentes, madres, abuelas, hijas.
Jóvenes y maduras. Bellezas auténticas, con arrugas, con canas, flacas, gordas, altas y bajas, lesbianas y heterosexuales. Un amplio espectro de mujeres diferentes y todas creíbles. Ningún artificio.

También hay hombres, y es cierto que como en el caso de las mujeres el espectro es muy amplio. Pero me llama mucho menos la atención. Porque es mucho más habitual que en el caso de las actrices femeninas.


Ellas son mujeres de verdad, de las que te puedes encontrar en el supermercado, en tu portal o en tu trabajo.

La primera temporada se centra en el caso de la desaparición de un niño.


La segunda temporada se entrelaza con el caso anterior y otro que quedó sin resolver hace pocos años.


Y la tercera temporada trata de la violencia machista. Y está muy bien llevado. La delicadeza y el buen hacer de la policía llama felizmente la atención. Ojalá sea realmente así. Y ojalá la policía española también actuara así siempre.


El atormentado protagonista masculino en las dos primeras temporadas, se transforma como una crisálida y se vuelve mariposa práctica en la tercera. Dejándose de tonterías y centrándose en lo que realmente importa.


La protagonista, es de esas mujeres que se crecen ante la adversidad, que cuando les pasa algo grave, terrible. Tiran adelante y si no saben qué hacer, no importa, fingen que saben, hasta que aprenden.


Aquí si que hay mujeres luchadoras, mujeres que luchan por sus hijos huérfanos, mujeres que trabajan en sus casas, que también ejercen profesiones para poder vivir ellas y sus hijos e hijas y contribuir a la economía y bienestar familiar.

Mujeres fuertes e inteligentes. Mujeres.

Mujeres que ejercen el feminismo desde la primera linea. Qué no se dedican a teorizar sin fundamento ni conocimiento, desde el sofá como pseudo feministas 2.0.

De las de verdad. De las que practican la sororidad, porque saben que todas somos hermanas y que si nos apoyamos ganamos.

Bueno, que la tenéis que ver.

Y feliz fin de semana.


miércoles, 17 de octubre de 2018

466.- CELEBRACIÓN. NUEVA ETAPA.


Hoy vamos a brindar todas y todos con cava.

Es un día importante, el comienzo de algo bueno y fructífero.

Hoy comienza una etapa que posibilitará el comienzo de otras muchas.

Falta alguien importantísimo en nuestras vidas, y sabemos que él sería el más feliz de todos. Se quedaría tranquilo al saber de la niña, de su niña. OIA.

Ya están todos, los tres.

Trabajadores como su padre, emprendedores, serios, competentes y cualificados.

En nuestra familia, sabemos que las ocasiones importantes y felices, tenemos que celebrarlas juntos y juntas. Qué de esto se trata la vida, de que juntos mejor.



Así que hoy celebraremos que una de mis hijas, comienza a trabajar en lo que le gusta y para lo que se ha formado, y que eso es un lujo. 

Y así lo cuento aquí, porque me siento muy orgullosa de ella y porque se lo merece.

Y animo a quien tenga algo que celebrar que lo haga en compañía, en buena compañía. Porque las cosas que no se celebran, las cosas buenas que no se comparten en la vida real, no sólo en el mundo 2.0, se quedan en el olvido propio y ajeno. Y pierden su esencia.


La alegría del abrazo, del beso, de las miradas cariñosas y los labios sonrientes. Las conversaciones que aportan ideas, consejos bienintencionados que son escuchados con amor y generosidad. 

En mi familia lo hacemos así.








domingo, 14 de octubre de 2018

465.- RESTAURANTE GRAN D'ITALIA Y CAFÉ DEL MAR.


El restaurante Gran d' Italia en el sur de Gran Canaria, entre el faro de Maspalomas y la playa de Meloneras, tiene fama de ser uno de los mejores italianos de la isla.

No voy a decir lo contrario, he comido ahí varias veces y en todas ellas, la comida ha sido correcta, al igual que el servicio. Cuenta con un plus, la terraza, con unas estupendas vistas al mar.

La relación calidad precio, me resultó correcta en cuanto a la comida, teniendo en cuenta los factores de situación geográfica, espacio, decoración, servicio, personal, etc.

La carta de vinos es corta y con algunas referencias extremadamente conocidas por su accesibilidad de compra y que están infladísimas de precio. Os pongo dos ejemplos, Mateus Rosé y Aura. No pongo el precio aquí, pero superan el 300% de su precio en bodega o supermercado.

Estaba pensando mientras escribía esto, como contaros lo siguiente, pero es una tontería hacerlo con adornos y "pañitos calientes".

Algunos/as camareros/as utilizan guantes blancos de algodón y son estas personas, las que ponen los cubiertos y transportan los platos desde la cocina a la mesa. Bien.

Pero, también nos trajo un camarero de guantes blancos, la cuenta a la mesa y sin quitarse los guantes utilizó el datáfono otra camarera, al cobrarnos.

Creo que sobra explicar para qué se utilizan los guantes en un restaurante, y que su uso debe ser exclusivo para el transporte de platos y el servicio en mesa. Nada más.

Y los guantes blancos, no pueden estar grises por el uso.

Cuando haces el curso de manipulador de alimentos, algo que repetimos mucho, es que mejor una mano lavada que un guante sucio.

Y a las clientas no se las debería despedir levantando la mano, intentando que hiciéramos un choque de palmas. No por favor. Totalmente fuera de lugar.

Insisto en que la comida estaba correcta, nada que decir sobre ella.

Y lo más importante, que me lo pasé estupendamente. Con Miriam es imposible no disfrutar de una comida, y sobre todo, de estar juntas.



Y al salir del restaurante, nos fuímos al Café del Mar, que está al lado, a tomarnos unos cócteles.

Miriam pidió un Spiced Mojito, delicioso y yo pedí un gintonic con la ginebra alemana Monkey 47.

El lugar tiene ese rollo chillout que se puso de moda hace unos años en Baleares y la costa mediterránea. Zona con sofás, tranquilo por la hora que era, precios ajustados a lo que ofrecen y personal con cierto puntito de autosuficiencia.

No es necesario explicar algo que el cliente no te pregunta y mucho menos decirle que algo no se prepara como se pide que se lo preparen. 

No se puede presuponer nada, sobre los conocimientos de un o una cliente. Nunca.

Después de una comida buena y unas copas estupendas nos volvimos a casita, encantadas con el día, la charla y la compañía.

Te quiero Miriam.