viernes, 11 de diciembre de 2020

559.- COSAS QUE PASAN


Este es uno de esos posts que lleva programados hace horas y que no estaba segura de que iba a publicar.

Con mi edad y mi vida, me planteo que es complicado volver a pensar en conocer a alguien que realmente me importe, volver a ilusionarme y sobre todo volver a enamorarme.

Pero la vida te da sorpresas y de pronto aparece alguien que te saca de ese lugar que se había convertido en un refugio seguro y aburrido y te dice, ven, cógete de mi mano y vámonos.

Y claro, te quedas sin saber qué decir ni qué hacer. Acojonada, vamos.

Y ahora toca, como en los tests  de prueba de conocimientos, elegir entre cuatro opciones.

Te vas, te quedas, te mueres de asco, pena o aburrimiento, o no sabes/no contestas.

Y mientras decides si  le das a la tecla de la plataforma, para comenzar el test, te planteas mil cuestiones, Y las dudas y el miedo te dejan quietecita en una esquina de tu vida y no sabes reaccionar. Porque por muy claro que lo tengas todo, no es sencillo. Volver a comenzar. ¿Y ahora qué?

Yo sé que he tenido una suerte inmensa, que ni yo misma me acabo de creer. Ha aparecido en mi vida, de la manera más extraña alguien que me rompe los esquemas, que me calma, me ilumina, me enseña y saca de mí todo lo bueno que yo creía desaparecido para siempre.

Feliz me tienes bonita, muy feliz. Cuando ya pensaba que eso no iba a volver a aparecer en mi vida, has llegado tú y has removido los cimientos absurdos que consideraba inamovibles y que ahora son nada. 

Calma, me digo a mi misma. Calma.

Y llevo días que sólo me viene  a la cabeza la actuación de Rosalía en la ceremonia de entrega de los premios Goya de 2019.


Y la vida consiste en ser feliz, lo demás da igual.

lunes, 7 de diciembre de 2020

558.- HOY TE REGALO LIMONES


La frase "si la vida te da limones haz limonada" se le atribuye al escritor Dale Carnegie, un empresario y escritor estadounidense, que de pequeño debió ser boy scout y dedicarse a vender limonada en la calle para recaudar fondos. 

A mi esa frase me suena a Mr. Wonderful y buenrollismo tontito, de charla motivacional, libro de autoayuda y seminario anual de empresas multinacionales.

Hacer limonada si no tienes una Thermomix es una auténtica pesadilla, porque exprimir limones no es como exprimir una naranja, no, nada que ver.

Cuando descubres, gracias a tu agente de ventas de Thermomix, como hacer una limonada sin ningún esfuerzo físico, excepto el pago mensual del crédito de la máquina, sabes que a partir de ahora tu casa puede convertirse en una sucursal del puesto de limonada de Carnegie, y después de la euforia inicial dejas de hacer limonada, porque necesitas una plantación de caña de azúcar para poder pasar el trago.

A todo esto, más de una se preguntará a que viene el tema cítrico justamente ahora, con una pandemia instalada ya en nuestras vidas, una Navidad que se aproxima y un incierto 2021. 

Les cuento. Mi amiga A. me recomendó hace unos pocos días, que para mi dolor de garganta venía muy bien un remedio casero, un limón calentado en el microondas se envuelve en un pañuelo que te colocas en la garganta y te lo sujetas con otro pañuelo. Yo lo explico como lo entendí. Y a todo esto ya me veía yo con un limón entero colocado en esa parte del cuello debajo de la nuez. Porque las mujeres también tenemos nuez, aunque su tamaño esté entre el pistacho y la avellana.

El caso es que se creó una situación muy cómica, y que igual contándolo aquí no lo parece tanto. Porque yo no me atrevía a  decirle que dormir con un limón entero atado al cuello me parecía arriesgado, incluso suicida. Pero fue tal el ataque de risa que el malentendido quedó aclarado, y si, se trataba de un pañuelo impregnado en zumo de limón caliente, no de un ejemplar entero. 

El remedio me sigue pareciendo curioso, exótico incluso, pero menos peligroso que lo que yo había entendido.

Y después de ese día pienso mucho en limones, porque nunca nos paramos a pensar con calma en un limón, los vemos en rodajitas en la Coca Cola, la corteza flotando en los gintonics, y acompañando a la sal al lado del vaso de chupito de tequila. Todo ello cuando aún se podía ir de bares. Porque seguro que el consumo del limón se ha reducido considerablemente en todo el mundo.

Se cuenta que hay personas a  las que les encanta comer limón, así a palo seco, que aprecian su sabor y disfrutan con fruición de ese placer inimaginable para el resto de la población. Yo creo que es una leyenda urbana inventada por alguna empresa agrícola limonera, y no existe nadie en todo el mundo que chupe limones.

El limón es como el hermano gilipollas de la naranja y el cuñado pesado de la lima. Un incordio. Por mucho que se ponga de moda el vasito en ayunas de agua templada con zumo de limón por lo de la alcalinidad.

Pero no quiero resultar negativa, que de lo más malo se puede sacar algo bueno y que no deja de ser un vegetal que también tiene derecho a su ácida vida.

Seamos positivas y pensemos en un limón de los de verdad, de fotografía instagramera, amarillo, con su ramita y hojita verde, y su parte más interesante, el pezón, porque los limones tienen una especie de bultito justo en la parte simétricamente contraria al lugar del que sale la ramita, que se asemeja placenteramente a un pezón, y que una vez reconocido, nos reconcilia con esta fruta a la que hace siglos se le debió reconocer su inapreciable valor erótico.

Ya sé que muchas pensaréis que esto del limón es un desvarío mío, incluso os preocuparéis por mi salud mental. Estoy perfectamente, y aunque parezca raro, todo es cierto. Y si, podía haberme ahorrado este post que tiene mucho de absurdo. Pero es un regalo. Porque los limones también se pueden regalar.


jueves, 3 de diciembre de 2020

557.- LA VIDA



Es muy difícil vivir, y muy fácil no hacerlo, y al contrario, es muy fácil vivir, y muy difícil no hacerlo. Es decir, que vivas como vivas, no existe una fórmula general para ser feliz, y que todo dependerá de las ganas y la ilusión que le pongamos. De saber relativizar todo aquello bueno y malo que nos sucede. Carpe Diem y Pura Vida.

Cuando piensas que vida sólo hay una y que se te acaba, aparecen nuevos horizontes, esperanzas e ilusiones. Siempre es así, y sólo acaba cuando morimos. Por ello no podemos permitirnos morir mientras nuestros corazones sigan latiendo.

Por fin acaba este año, que en lo personal ha sido muy malo, terrible y a nivel mundial ha sido una pesadilla que parece no tener fin.

Yo estoy aprovechando todo lo ocurrido en este año para aprender que se puede vivir de otra forma que no es aquella que conocíamos y que muchas veces no nos hacía felices aunque pudiéramos hacer lo que nos daba la gana, pero siempre de cara al exterior. Ahora sabemos que se puede vivir intramuros, tanto físicamente como emocionalmente. Y que todo ello nos hace conocernos mejor, a nosotras y a las demás.

Hemos tenido la oportunidad de conocer a gente que desde sus casas establecían con nosotras conexiones sorprendentes, de quienes hemos aprendido y a quien hemos enseñado. Relaciones impensables en otro momento social y personal, llenas de generosidad y comprensión, de sororidad y compromiso.

Yo no quiero la "normalidad" que tenía, porque ahora soy más feliz y más equilibrada. Ahora valoro cosas en las que antes ni me detenía a pensar. Ahora sé que lo que antes me parecía imprescindible para vivir, ya es innecesario o menos necesario.

Cuidar a quien quiero, esté lejos o cerca, cuidarme yo para poder cuidar y hacer sentir a quien me importa, que yo estoy aquí siempre.

Diciembre no será un mes fácil, pero depende de cada una de nosotras el suavizar lo que puede parecer adverso, duro e inhóspito. Antes era el mes del despilfarro, de las tarjetas echando humo, de las compras compulsivas, de la comida y la bebida a chorros, de las fiestas y reuniones con gente que te importaba un carajo. Ahora ya no tiene porque ser así, no debería volver a ser así, ya no es necesario que sea así.

Practiquemos el buen humor, el amor, la delicadeza y la ternura. Aprendamos todo aquello que siempre quisimos aprender y que fuimos dejando de lado por falta de tiempo.

Vamos a vivir fácil y difícil. 



miércoles, 14 de octubre de 2020

556.- LOS NICHOS DE LA IGNORANCIA

Comenzar a escribir este post diciendo que vivimos una época incierta, en la que nos sentimos vulnerables y no queremos pensar demasiado en el futuro, es una redundancia.

Pero este estado no ha sido un revulsivo que haga pensar en la importancia del día a día, en que puede que este mundo tal y como lo conocemos se acabe y quizás estamos perdiendo la última oportunidad de saber, de conocer.

Cada vez más a menudo, me siento rodeada de ignorancia, de gente orgullosa de no saber, que te dice que nunca ha leído un libro y lo dice con orgullo, gente que incluso pregona su ignorancia  en las redes sociales y se percibe en ella la autosatisfacción que le causa ese desconocimiento. 

No todos ni todas hemos tenido la suerte de poder estudiar, de tener una casa llena de libros, de poder acceder a nuestra cultura, porque nacimos en un país donde las oportunidades estaban reservadas para unos pocos. Con el tiempo, el acceso a la cultura y al conocimiento fue haciéndose más accesible a sectores menos favorecidos de la sociedad, pero es complicado pretender que alguien aprenda a hacer pan si se lo das caliente y no le explicas el procedimiento para su elaboración.

Somos ese país en el que se sigue exaltando al personaje del Lazarillo de Tormes y poniéndolo como ejemplo de inteligencia. Y así seguimos perpetuando el robo, la trampa, la ignorancia y la falta de empatía.

Desde que comenzó el primer confinamiento, en marzo, a todos y a todas nos ha tocado hacer un trabajo de introspección, de forma involuntaria en muchos casos, pero inevitable por el hecho de tener que pasar tantísimo tiempo sin los entretenimientos habituales. Da igual si veíamos series sin parar, cocinábamos más de lo que comíamos, o hablábamos varias veces al día por vídeo conferencia con familiares, amigos y amigas e incluso con desconocidos y desconocidas.

A pesar de todas esas interacciones, hemos tenido más tiempo para pensar, e incluso sin querer no nos ha quedado otra que mirarnos por dentro. Y lo que en la mayoría de los casos podría haber sido un buen trabajo de autoconocimiento, un tiempo en el que aprovechar para conocernos más y mejor, para cuidarnos y mimarnos a nosotras/os mismas/os, se convirtió en una profundización en la ignorancia de cada uno, en una pérdida de tiempo y en una exaltación de orgullo insano de la misma.

Hordas de negacionistas que ni siquiera saben lo que niegan, grupos cada vez más grandes de desinformados/as, rebaños humanos de pseudocintíficos/as que alaban a Trump, lectores y lectoras ávidos/as de fakenews.

Y ahora que esto no acaba, en este momento que nadie sabe lo que pasará mañana, en este instante en el que la incertidumbre por el futuro próximo y lejano es cada vez más cierta. Aún, hay quien se siente a sus anchas en la enorme ciénaga donde la estulticia, el desconocimiento de culturas propias y ajenas, la falta de curiosidad y la negación de la verdad, se convierte en una ansiada piscina en la que revolcarse satisfecha/o.

Todos organizados en un enorme cementerio plagado de nichos en los que resguardarse de la verdad, del saber y del conocimiento. Asomando la cabeza sólo para escuchar el silencio del resto, ese silencio de una sociedad enferma que no ha sabido aprovechar la oportunidad que una desgracia mundial nos brindaba. 

Posiblemente nada vuelva a ser como antes. Peor o mejor, dependerá de todas nosotras,

 

 


lunes, 5 de octubre de 2020

555.- He vuelto.


Desde el siete de julio no he publicado nada, escribir si que lo he hecho, pero hay cosas que mejor hayan quedado guardadas, de momento.

Desde julio hasta hoy han ocurrido muchas cosas, tantísimas que he estado valorando si contarlo aquí, y aunque mi blog ha tenido etapas de diario personal, de momento lo ocurrido en estos meses no quiero compartirlo.

A pesar de todo, no he pensado cerrar el blog, porque como ya he dicho muchas veces, forma parte de mi vida desde hace más de nueve años y quiero que siga estando aquí.

Este post será breve, sólo quería avisar que sigo viva.


A tantas tristezas y pérdidas en estos meses, debo contar que en septiembre me he encontrado con cuatro personas que sin saberlo me han ayudado a volver a reír, a ocupar mi tiempo en actividades que me divierten, a entender que la amistad puede llegar cuando menos te lo esperas, y que por muy misántropa que yo sea, siempre existe un resquicio que nos reconcilia con lo bueno de la especie humana.

Vuelvo a mi blog que es mi casa, vuelvo a asomarme desde este pequeño balcón, a la vida. Porque ella, la vida no se ha ido, aquí sigue, siempre.




martes, 7 de julio de 2020

554.- ELSA RUÍZ


Me duele mucho escribir este post. Además en un momento personal en el que no estoy al cien por cien. Pero también por motivos que me atañen directa y personalmente no podía dejarlo pasar.

Elsa Ruíz, así la conocí trabajando en el programa "Todo es mentira" (debí pensar que esto era un mal augurio), mujer transexual, activista y abanderada de la causa. 

Nada puedo decir hasta hoy de todo su argumentario. La he considerado tal y como ella se definía y presentaba, una mujer trans y feminista.

Le han caído cientos de críticas desde las TERF, (feministas radicales trans excluyentes), grupo del que yo me distancio lo más posible y que considero próximo a un fascismo machista y heteronormativo, alejado infinitamente de la sororidad.

Ella, Elsa,  ha tenido un discurso transfeminista válido y fundamentado, en el que su propia vivencia trans lo hacía incluso más real y creíble. 

Se ha convertido en una mujer trans de referencia, frente a ese feminismo obsoleto que no admitía a las mujeres trans, por considerar que el falo define a la persona, y que la excluye del movimiento feminista.

Un movimiento este, el de las TERF, que excluye a personas que son mujeres, y que sólo contemplan el sexo biológico como definición de lo que somos. 

Hasta aquí todo bien, en cuanto a Elsa. Ejemplo mainstream de la transexualidad femenina, válido desde mi punto de vista, porque ha llegado a mucha gente que necesitaba conocer más sobre la realidad trans y de una forma asequible, sin olvidar el compromiso social y personal que exige.

Pero esta mañana me despierto y me entero de que no hace muchos años, Elsa era Edu, monologuista del tres al cuarto que utilizaba la caricatura femenina como centro de sus discursitos. Ridiculizaba a las mujeres, a las mujeres víctimas de violencia de género, a mujeres en una situación muy vulnerable. (Y estoy contando poco).

Todo esto lo podéis comprobar viendo sus videos en Youtube si los buscáis por Edu Ruiz.

Yo entiendo que todas y todos evolucionamos y que muchos y muchas podemos tener un pasado político, social y personal del que no estemos orgullosas u orgullosos. Pero si tu profesión es pública, si te expones a las RRSS y diferentes medios de comunicación, hazte un previo lavado de cara, porque deberías saber que tarde o temprano, toda aquella mierda saldría a flote. Pide perdón, excúsate por como eras antes, por como pensabas.

Y lo peor no es que le haya explotado a Elsa en su cara, no . Lo peor y terrible de todo esto es que ella se ha abanderado como referente de la causa transfeminista y que muchas personas que se encuentran en esa situación personal que relata, han confiado en ella, se han sentido representadas y defendidas. Personas muy vulnerables, sin un discurso político propio porque aún no han llegado a elaborarlo, y sentían que ahí estaba Elsa para representarlas.

Y ahora, las TERF van a utilizar toda esa mierda para utilizarla contra ella, y a mi me da igual. A mi lo que me duele es que muchas mujeres trans que se sentían visibilizadas y representadas por ella, han perdido a una referente, porque esta señora no supo gestionar su pasado vergonzoso, antes de convertirse en esa personaje que abanderaba la causa transfeminista. Y si Elsa por todo esto se ha convertido en el blanco de las críticas TERF, el fuego les va a llegar también de manera directa a muchas mujeres trans que nada tienen que ver con la personalidad que Elsa ha escondido.

Yo no pongo en duda la identidad de Elsa, a día de hoy me importa una mierda quien sea o quien diga que es. Que no me importe no significa que no la respete.

Pero después de que sus abogados hayan publicado esta tarde una carta en la que advierten de las consecuencias legales a quienes hagan uso de esas imágenes de cuando era Edu, machista y misógino. Sólo puedo decir que esperaba que te hubieras dado la misma prisa que en otras ocasiones para publicar un video en Youtube enfrentándote a las críticas que como supuesta mujer transfeminista rebatías.

Todas esas imágenes de tu pasado están en las redes sociales y cualquier persona tiene acceso a ellas.

Espero que las marcas que han apostado por ella dejen de hacerse publicidad a través de sus redes sociales. Ropa, comida preparada, etc. Porque  en mal reclamo se ha convertido en pocas horas. Los unicornios están ya huyendo.

Es una pena, que hayas caído en todo aquello que has criticado tan bien y tan duramente. Ahora espero que tantas mujeres transfeministas que te han apoyado, se aparten y te dejen sola, para que te aclares personal y públicamente.

Es vergonzoso que hayas llegado hasta aquí y aún no hayamos escuchado ni leído una disculpa pública. Porque entiendo que ya no pienses como pensabas en esos vídeos nefastos, porque todas las personas evolucionamos y nos deconstruímos para volver a construirnos. Pero Elsa, esto sólo está dando argumentos a las TERF. Les has proporcionado un enorme trampolín desde el que lanzar todo su veneno contra el transfeminismo.

Y a quien perjudica profundamente es a tantas mujeres transexuales que utilizaban tus argumentos como propios y reflexionaban sobre sus propias realidades gracias a ti. ¿Ahora qué Elsa? 


jueves, 11 de junio de 2020

553.- GRACIAS A LAS ARTISTAS


Fue en marzo cuando, a través de la cuenta de Instagram de Tombow @tombow.spain, tuve la suerte de conocer a varias mujeres que desde sus respectivas cuentas de Instagram hacían videos en directo, enseñando a dibujar, pintar y hacer lettering.

A mi lo de pintar nunca se me ha dado muy bien, pero siempre había tenido ganas de intentar hacerlo, al menos con motivos sencillos. Y esta fue la oportunidad, además de ocupar el tiempo libre que he tenido durante el confinamiento.


No es que me haya convertido en una pintora, pero ahora ya me atrevo a dibujar cositas sencillas y utilizar brush pen, lápices acuarelables, fudenosukes, y un montón de cosas más que tenía, como buena friki del material de papelería y dibujo, pero que no me atrevía a usar por desconocimiento.


He dibujado cositas que me gustan mucho y además todo el tiempo que he empleado en hacerlo ha sido un placer, he estado super tranquila y lo he disfrutado un montón.


Y lo importante de este post no son mis avances en el dibujo, la pintura y el letering, sino todas esas mujeres que con una enorme generosidad nos han dedicado su tiempo a otras tantas que cada día nos juntábamos para seguir sus clases y pasar un rato divertido, relajante y aprendiendo.

Este es mi pequeñito homenaje para:

@el_amante_volador 
@itzidreams
@casiopealand
@littlehanna.shop
@letteringalbum
@woodlove_letters
@dulcemat_letters
@paspartucraft
@neusilustra
@miss.meissa
@joelminana (el único hombre)

Si me dejo a alguien, que me disculpe.

Como anécdota, la pregunta más repetida:  ¿se va a quedar guardado?

Gracias a todas por compartir desinteresadamente vuestros conocimientos con otras mujeres. Esto ha sido una hermosa muestra de sororidad.


miércoles, 10 de junio de 2020

552.- RAYUELA O LA PRECOZ INTERACTIVIDAD LITERARIA


Me gustaría saber cuantas de vosotras, fieles lectoras mías, habéis tenido la dicha o la desgracia (según se mire), de leer RAYUELA, la novela que Julio Cortázar publicó en junio de 1963.

Yo, dos veces.

La primera vez fue a trompicones, por la obligación de una catastrófica metodología educativa empleada por una profesora que pensó que "La tía Tula" de Unamuno nos pondría cachondas.

Quizás el tejo era su entretenimiento favorito y no cayó en la cuenta de que no se trataba de un libro juvenil tipo colección "El Barco de Vapor" en el que una cuadrilla de adolescentes daban saltitos sobre la rayuela.

Estoy segura de que ella nunca leyó RAYUELA.


Yo si lo leí, con grandes lagunas, desesperación y teniendo la impresión de estar en medio del más absoluto de los caos. Quizás no fuera el libro, puede que fuera yo. En aquellos días tocaba mucho el piano.

Con 15 años mucho hice, además de su posterior reglamentario y encorsetado comentario de texto.

El capítulo  7 si lo recuerdo, el beso, toco tu boca... Muchísimo más exitante, erótico y sensual que Tula y el pasmado de su cuñado Ramiro.

También recuerdo que fue como el puente libro, el libro puente entre París y Buenos Aires.

Pero aquella pésima profesora de literatura no tenía buen criterio, ni bueno nada. No consigo recordar su nombre, pero me ha venido a la cabeza Úrsula, aunque estoy segura de que no era ese su nombre, pero le pega mucho. Si.

Volví a leer RAYUELA con muchos años más. Fue una casualidad que no entiendo ni como buena ni como mala, pero allí estaba el libro. Misma editorial, misma portada y misma edición de bolsillo.

Otra casa, otra estantería y manchitas de humedad de color marrón clarito en un libro que nunca se había abierto. Estaba viejo y nuevo a la vez. Virgen por dentro y profanado por fuera. Esto pasa mucho.

Y cómo yo por aquel entonces tenía profundos episodios de ocioso tedio, en un arranque de intelectualidad muy atrevido por mi parte, me comprometí conmigo y con el abandonadito libro a sacarlo de aquella lúgubre y fría biblioteca del tres al cuarto y comenzar un romance literario con él.

Nunca he sido yo muy amante de los juguetes sexuales, y en este caso no fue diferente. Lo quise mientras duró. Pero cumplí y leí.

Comencé con cierto temor a lo desconocido, dando por hecho que en mi memoria no quedaba ni rastro de aquello que con 15 años no había tenido mayor relevancia que una calcomanía y sintiendo que tampoco ahora iba a tatuarme un tejo en el cuello.

Pero error. Reconocí a Horacio Oliveira, a Lucía la Maga y a Rocamadour. Y animada llegué al capítulo 7 y volví a experimentar aún más intensamente el beso, toco tu boca...

Continué adelante, disfrutando algunos momentos más que otros, pero decidida y llegué hasta el final del capítulo 56. Allí se me presentaron diferentes opciones para continuar mi lectura, mi viaje, mi ruta, mi juego, mi camino.


Ni con 15 años, ni tantos años después, había leído las instrucciones que están al comienzo del libro.

Nunca leo las instrucciones de los juegos, ni los prospectos de las medicinas, ni el modo de empleo del móvil, ni de los electrodomésticos. No. Yo aprendo a medida que voy jugando, a medida que voy viviendo.

Seguí adelante con el libro, de la manera más convencional posible, hasta el capítulo 155, el último. Y esa parte de allá ya no resultó tan apetecible, porque estaba haciendo justo lo que no debía hacer. Lo acabé.

Ha pasado tiempo de aquella lectura y pocas veces me he detenido a pensar en ello, pero la semana pasada fui a una librería, mi primera salida postconfinamiento,  quería comprarme "La Peste" de Albert Camus, fue imposible porque se ha agotado. Se ve que necesitamos referentes para entender la situación que estamos viviendo.

Y allí, en una bonita librería de Triana me encontré a RAYUELA otra vez. Esta vez nuevo, limpio, con olor a libro. No lo compré.

Y esta noche mientras escribo este post que posiblemente pueda publicar antes de las 02:00 de la madrugada, sé que ya hoy miércoles voy a ir a buscarlo y que lo traeré a casa, aquí, conmigo.

Esta vez lo trataré de acuerdo al propósito para el que fue creado, interactuaré con él, no seguiré un orden falsamente lógico, echaré un vistazo a las instrucciones aunque no sé si las respetaré.

Esto será como un videojuego o como el capítulo de una serie en la que podamos elegir o incluso decidir el final.

Cuando acabe te guardaré bien y te llevaré conmigo, porque el camino se está iluminando de nuevo y da igual lo corto o lo largo que sea.

Vamos a andarlo bien.

Gracias no Úrsula.

martes, 5 de mayo de 2020

551.- PELÍCULAS DE CLAUSURA.


Desde el sábado 2 de mayo de 2020 ya podemos salir a dar un paseíto de una hora, eso si no pertenecemos al colectivo infantil, ni somos padres o madres de niños y niñas menores de 14 años, si no somos personas mayores, si no somos dependientes, y si no... Me pierdo.

Aún no he decidido si saldré, porque, espero equivocarme, creo que será un descontrol.

Y no voy a seguir escribiendo sobre los posibles paseos y las irresponsabilidades que se dan diariamente. Ejemplo: despedida de IFEMA. Vergonzoso y peligroso.

Una de las cosas que más hacemos durante esta clausura preventiva es consumir cine en casa, tenemos la suerte de contar con plataformas de pago y alguna gratuita que hacen inagotable la fuente de recursos cinematográficos.

Sé que posts como este que escribo, se repiten  a diestro y siniestro, pero espero aportaros algo nuevo al panorama de las recomendaciones.

Os propongo un listado con un breve comentario sobre cada película y la plataforma en la que podéis verla.

EL HOYO

Esta película es pura filosofía, un estudio de la condición humana, del egoísmo y del miedo. Sólo vedla si tenéis un estómago a prueba de bomba, sólo si sois capaces de interrumpir la conexión cerebro - estómago. Arcadas y carreras al baño a vomitar están garantizadas si sois delicaditos/as.
Para mi ha sido una curiosidad ver a Antonia San Juan en esta película, que por primera vez no parece interpretarse a si misma. Pero sigue sin convencer. Y tiene su explicación. Es la visibilidad lo que tiene.
NETFLIX

CALL ME BY YOUR NAME


Preciosa historia de amor en un lindo pueblecito italiano, con uno de los protagonistas que me recuerda a Tasio de muerte en Venecia, pero mucho más hablador, decidido y mayor. El otro protagonista es tan guapo que quita la respiración. Supongo que esto es producto de la clausura. 
El padre y la madre son adorables, abiertos, libres, con ese pensamiento común pero que pocos/as llevan a la práctica, "lo único que quiero para mis hijos/as es que sean felices".
Pues estos si lo hacen, lo entienden y lo disfrutan.
Hay un armario grande que como siempre, sólo quien es capaz de salir de él verá el horizonte de la felicidad y la libertad, y quien no lo haga sucumbirá a la invisibilidad, al miedo y a la infelicidad.
NETFLIX

NOCHE DE JUEGOS


Esta es mala, pero la incluyo para que estéis avisados y ya no tengáis excusa si a pesar de todo la veis. Pareja de gamers que se enamoran y no dejan de jugar.
Lo mejor el perro.
NETFLIX

EL ESPÍA QUE ME PLANTÓ


Ni con la traducción se han puesto de acuerdo. Está en la misma línea de la anterior. Mala malísima. Es que ni para pasar un rato entretenida, No llegué al final porque me dormí, y es de esas que da vergüenza ajena decir que la habéis visto. 
Dos estadounidenses que se meten a espías a causa del exnovio de una de ellas. Infumable, incomible e imbebible.
Esta no os dará arcadas como El Hoyo, pero os puede afectar cerebralmente.
NETFLIX

HOGAR

Domestic Noir español. Thriller inesperado en el que la moraleja nos dice lo que tienen la ambición y la envidia, pero que no hagamos caso de moralinas, que ya nos las arreglaremos.
Javier Gutiérrez, el actor protagonista al que no conocía, me ha gustado. Y Mario Casas, pues qué voy a decir de él, guapo y ya.
NETFLIX

ZODIAC


Larga película basada en hechos reales sobre un asesino en serie. Me gustó, es entretenida y como siempre en este tipo de película, al igual que en la vida real, sorprende la complejidad del ser humano cuando es malo.
NETFLIX

ORIGEN

Básicamente la he dormido y no la he acabado de ver, cosa que me ocurre poco, yo que siempre llego al final. A mi no me gustó lo que he visto, me pareció un lío de flashbacks mal hilados y un aburrimiento, la verdad. No perdáis vuestro tiempo.
NETFLIX

MENTIRAS PELIGROSAS

Tipo telefilm de domingo por la tarde. Entretenida y soporífera, dependiendo de lo que hayáis comido y bebido. No os recomiendo que la veáis si tenéis cosas mejores que hacer. Aprovechad el tiempo, que es oro.
NETFLIX

ROBANDO VIDAS

Si, si, si. Hay que verla. Angelina Jolie es uno de los principales motivos. A esta chica le pondría un piso en primera linea de playa para que venir a verme no le supusiera ningún gasto ni inconveniente. Y la película es un thriller previsible pero que se puede ver y aunque no nos da mucha opción a ejercitar nuestra imaginación, se deja,


LAS PLAGAS DE BRESLAVIA


A ver... Esta película no va a pasar a los anales de la historia del cine, pero se deja ver. Tiene su puntazo gore, la protagonista atormentada con un corte de pelo que parece de
pandemia, y ¿qué queréis que os diga?, a mi me tuvo entretenida  todo el tiempo que duró, y ahora es muy necesario eso. Si os gusta el género policíaco, pues la veis y listo.
Y una pregunta, ¿os habéis dado cuenta de cómo es el cine que se hace en cualquiera de las antiguas repúblicas socialistas de la URSS?

MISIÓN DE RESCATE



Vuelvo a repetir que no perdáis vuestro tiempo. Cómo bien dice el título, una misión de rescate, en la que hay disparos a tutiplén, lanzamientos de granadas, tiros a bocajarro, persecuciones en coche, cuchilladas, sangre y alguna que otra lagrimilla. Si os gusta el género, adelante.  
El protagonista es guapísimo hasta que se cubre de sangre. Chicas y chicos, si estáis solas/os y sin satisfayer, pues la veis e igual funciona. Si no, os lo ahorráis.
NETFLIX

CARMEN Y LOLA

Os la recomiendo mucho. Historia de dos chicas gitanas que se enamoran. Las consecuencias de todo ello en una cultura que tradicionalmente ha cosificado a las mujeres. Machismo y lesbofobia. Y ojo con la multiculturalidad, que está muy bien, siempre y cuando no ayude a perpetuar el heteropatriarcado.
Es decir, que por querer integrar a la etnia gitana, no vamos a permitir que continúe abusando de las mujeres de su etnia. Y no me voy a poner a explicar ahora sus usos y costumbres, que en muchos casos son aberrantes.
YOUTUBE



Creo que me he alargado mucho con tanta reseña. pero mi intención no es otra que intentar que cuidéis de vuestro tiempo, que lo aprovechéis y no lo malgastéis. 

¡Ojo!, que ni por un momento pretendo hacerme pasar por una crítica cinematográfica, que como ya dije aquí, no paso de criticona de sofá.

Saludos a todas las que me leéis y feliz y prudente clausura.  











martes, 28 de abril de 2020

550.- TRILOGÍA DEL BAZTÁN


El Valle de El Baztán se sitúa al oeste de los Pirineos, en Nafarroa (Navarra), provincia de Euskal Herria y cuna del Euskara.

Próximo al Parque Natural de Bertiz, que después de la Selva de Irati es el segundo núcleo forestal mejor conservado, no sólo de Navarra, sino de toda la península ibérica.

Elizondo es la capital de El Baztán. Se trata de una población rodeada de naturaleza, paisaje verde y clima atlántico suave y húmedo. Tiene una arquitectura que destaca por sus casas señoriales y palacios; muchas de esas casas se denominan "casas de indianos" por que pertenecieron o pertenecen a emigrantes retornados de América que regresaron enriquecidos.

En julio se celebra la "Baztandarren Biltzarrra", fiesta en la que se reúnen los 15 pueblos que conforman El Baztán.


En cuanto a la gastronomía, es típico el "Txuri eta Beltz", un guiso de tripa de cordero y el "Urrakin egina", chocolate con avellanas enteras.


¿Y por qué os cuento todo esto?

Pues para ubicaros en el entorno geográfico y cultural del maravilloso lugar en el que se desarrollan las dos películas de las que escribo hoy.

Que son thrillers, con grandes dosis de costumbrismo local. Novela negra.


"El Guardián Invisible", de la que ya escribí una breve reseña aquí, en 2017 y "El Legado en los Huesos".

Ambas películas están basadas en las novelas del mismo nombre, de la escritora Dolores Redondo, y forman parte de la trilogía El Baztán.


Debo reconocer que no he leído las novelas y puede que por eso me hayan gustado tanto las películas, no tengo el referente de lectura para poder comparar e identificar si son fieles a su origen.

Además, otro punto muy importante que reconozco es mi gusto, disfrute y pasión por Euskal Herria, por sus gentes, su cultura, su paisaje y su clima.

Os recomiendo mucho que las veáis. Las películas. Y también desde que se pueda penséis en El Baztán como un posible destino vacacional.

Las dos películas entretienen, nos muestran el bello paisaje de la zona y nos cuentan del esoterismo y mitología local.

Como curiosidad la "itxusuria", enterramiento de bebés recién nacidos y no bautizados, que no es exclusivo de esta zona, desde luego, porque la iglesia católica ya se ha preocupado de hacer de esto un misterio límbico, perturbador y perverso en muchos casos.

Capítulo aparte merece la alusión que se hace a los "agotes, pueblo discriminado, sin asentamiento geográfico determinado y cuya presencia data desde el siglo XII, existiendo pequeños grupos de población en el País Vasco francés, Navarra, Guipúzcoa, Huesca y Aquitania.

No se ha dado por válida y cierta ninguna teoría sobre este pueblo, pero cualquiera de ellas le atribuyen un germen perverso, que va desde su no pertenencia a la iglesia católica, paganismo celta o godo, musulmanes no conversos, albigenses o cátaros, leprosos o delincuentes fugitivos condenados en el medievo y huidos de Francia.

Quizás me he pasado con tanta historia, pero os animo a ver las películas.

sábado, 18 de abril de 2020

549.- VITELLO TONNATO


A esto me refería ayer cuando hablaba de miscelánea.

No puedo escribir todos los días, o cada vez que me apetece, del confinamiento, de virus, de política o de mascarillas fakes. No.

Y hoy voy a poner aquí una receta que es sencilla, internacional y está rica rica.

El vitello tonnato es una receta italiana de la región del Piamonte, y que por la emigración italiana a Argentina tiene allí muchos/as adeptos/as.

Consiste en un asado de redondo de ternera que se corta en lonchas muy finas. Estas lonchas se extienden sobre una bandeja o un plato y se cubren con una salsa.

El redondo de ternera se puede asar en el horno, cocinar en una olla ordinaria o exprés, o si tenéis una CrockPot es la mejor opción, porque se queda muy jugosa y conserva todas sus propiedades nutritivas y organolépticas.

Para asar esta pieza de carne con el método que hayáis elegido, es conveniente prepararla para el proceso de cocción. En una sartén marcarla con mantequilla para que quede dorada por todos sus lados. Así evitamos que la carne pierda sus jugos.

Una vez marcada se coloca en la olla, horno o Crockpot.

Añade sal, pimienta, dos cucharadas de aceite de oliva y romero. ¿Porqué romero?  Puede ser otra hierba, o una mezcla de varias, pero mejor romero, Esto es elección mía, pero podéis modificarla, aunque no os quedará tan bien como a mi.

Una vez asada la carne en el método de cocción que hayáis elegido, y con el que debéis haber tenido en cuenta que la carne debe quedar medio hecha, es decir, rosadita por dentro.

La dejáis enfriar sobre una rejilla con un plato debajo para recoger los jugos que suelte y que podéis aprovechar para congelar en un molde de cubitos de hielo y aprovechar posteriormente para otras preparaciones.

Una vez fría, la metéis en el frigorífico al menos seis horas y posteriormente la cortáis en lonchas muy finas. Si tenéis cortafiambre mejor, y si no con un cuchillo bien afilado.

Se colocan las lonchas en una bandeja.

Durante el tiempo de cocción y/o enfriamiento de la carne tenéis que poneros a preparar la salsa que es la gracia, el alma y la vida de este plato.

En la Thermomix, robot de cocina, procesador o batidora de toda la vida de Dior, ponéis 250 grs de mayonesa que puede ser de bote o preparada por vosotras/os, 6 filetes de anchoa de lata a la que habréis quitado con vuestras manitas el exceso de sal,  dos cucharadas de café de alcaparras escurridas, 125 grs de atún en aceite de oliva escurrido y un pepinillo agridulce pequeño.

Todo esto se bate, procesa o tritura  y con ello se cubren las lonchitas del redondo que ya deberíais tener preparadas en una bandeja o en un plato. Se decora por encima con unas alcaparras.

Y esto es todo. Es una receta de dificultad media y no excesivamente costosa económicamente.