174 - INHÁBIL

Muchas consideramos el mes de agosto como un mes inhábil, y no sólo por la última acepción del diccionario de la R.A.E. : "Se dice del día festivo y de las horas en que, salvo habilitación expresa, no deben practicarse actuaciones"

Es cierto que son muchos días para no practicar actuaciones, pero pocas actúan en este mes, y quiénes lo hacen van a un ritmo diferente y podríamos aplicar otra acepción de la palabrita: "Falto de habilidad, talento o instrucción"

Al calor propio de este período hay que sumar el cierre de comercios, empresas, bares, restaurantes, terrazas y también el hecho de que parece que el resto del mundo está de vacaciones.

También permanecen inhábiles los blogs, algunos, qué otras aún de vacaciones siguen dándole al teclado y a la cámara.

Como ya dije alguna vez, no me gusta el verano, y agosto me parece el mes rey y emblema del estío. 

Es el mes del todo el mundo a sudar en camisetas de tirantes, del todo a un euro de sombrillas, colchones inflables, flotadores, chanclas y viseras.

Mes de chiringuito de playa con mesas y sillas grasientas, con frituras en aceites requemados y canciones de Georgie Dan, como mínimo.

Y nuevamente la R.A.E. me da la razón, definiendo la palabra "agostar", como "consumir, debilitar o destruir las cualidades físicas o morales de alguien"

Y si te gustan las ciudades fantasmas, aprovecha, porque en agosto la gente desaparece, los parques infantiles se quedan vacíos, las tiendas (que están abiertas) tienen el aire acondicionado a toda pastilla para que nos probemos los abrigos y hasta el tráfico se ralentiza.