Por fin..., esto ya llegaba a la tortura mental. Mañana es mi último día de trabajo hasta finales de agosto.
Aún no se que haré ni dónde iré, pero seguro que voy a estar bien porque si se donde no iré y lo que no voy a hacer.No quiero playas masificadas, ni quemaduras solares, ni música de chiringuito, ni niños y madres / padres gritando.
Solo quiero tranquilidad. Reirme, hablar con quien mejor me escucha, escuchar a quien mejor me habla, comer cositas ricas y VIVIR.
Dejar pasar despacio el tiempo, para que parezca más y contemplar sin descanso lo que más me llena: VIDA.
No quiero correr a ver monumentos, museos y ruinas, todo a contrarreloj.
Quiero sentarme en una terraza, tomando una cervecita y ver pasar a la gente, mirar la VIDA y coger su mano en sus ojos.
No quiero hablar de la crisis, de los ladrones, de este país que puede que ya no tenga futuro.
Quiero pensar en todo lo que hay fuera y lo que es alcanzable. Recordar a "perrito y cabrita", a los osos, los pingüinos, las camisas de cuadros, la policía montada de Canadá y en Reykiavick.
No quiero pensar en huir ni en escapar.
Quiero pensar en encontrar y descubrir.
3 comentarios:
hola!pues que disfrutes de lo que más te guste y te llene estos días.un besote!
Espero que se esté cumpliendo todo y estes disfrutando de lo lindo. Un besitos.
Y para cuando la vuelta??
Besos.
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