Yo me mordía las uñas, si.
Hasta hace apróximadamente 3 años no había dejado de hacerlo desde que era pequeña y durante cortos períodos de mi vida las he tenido lo suficientemente largas como para pintarlas.
Por todo ello el mundo laca, lima, cutícula y quitaesmalte, era un misterio para mí.
Pero como digo, desde hace unos tres años he abandonado ese "feo vicio" y luzco unas manos bonitas y bien cuidadas.
Y para que lo podáis comprobar aquí he dejado una muestra de mis utensilios manicuriles y de mis preciosas manos.
Que siempre es más agradable la caricia de una mano bonita.
Sigamos distraídas/os.
3 comentarios:
Jo! Siempre he pensado que es imposible dejar de ser un mordedor de uñas totalmente... Yo me las pinto y la verdad es que me las muerdo menos que antes, por temporadas, etc. Pero no sé si algún día podré decir que no me las muerdo ya nunca... ¡Me encantan las uñas pintadas y la gente que sabe llevarlas bien cuidadas!
Tienes razón Anita, a mí me costó mucho más dejar de morderme las uñs que en su momento dejar de fumar. Aunque ahora fumo y no me muerdo las uñas. Saludos guapa.
A mi me pasó como a tí: me las mordía, un día decidí tenerlas largas y, aunque no consigo hacerlo por que se me rompen que da gloria y por que, del mal hábito, me crecen muy feas, no me las muerdo. Pero lo peor es que me paso muchos momentos regañando a la niña por que tiene el mismo mal hábito y sé lo malo que es.
besos
Publicar un comentario