jueves, 5 de diciembre de 2013

210 - SABER DECIR NO


Esa palabra que se convierte en algo insulso según en que bocas, la asertividad. 
Saber y ser capaz de decir no, de decirlo sin herir, sin provocar enemistad y sin sentirse culpable.
No es fácil, pero más difícil es no hacerlo y quedarse en un terreno complicado que no es el de nuestras expectativas.
Escucho, y seguro que nos pasa a todos/as, contradicciones, palabras vacías de contenido sentimental y práctico.
 Injerencias en vidas ajenas que con el barniz de la buena intención, no son más que reproches velados y desconfianza.
La denostada y vapuleada palabra libertad, convertida en bandera de displicentes malhumorados que llevan como escudo la desilusión contagiosa escondida entre discursos de modernidad, hipsterismos y otras banalidades.
Basta de excusas que sólo hacen de bálsamo de Fierabrás, basta de consejos inútiles que pretenden frenar la creatividad y la ilusión.
Hoy no tengo un buen día, pero esto es pasajero y todo se pone en su lugar, nunca solo ni con tiempo.
 Las cosas cambian como queremos cuando nos levantamos, las tomamos y las cambiamos de sitio o las eliminamos. 

5 comentarios:

reality beats dijo...

Espero que vaya mejorando tu día, un mal día también ayuda a apreciar mejor cuando llega lo bueno, y más, si te hace reflexionar sobre cosas como las que comentas.
Creo que nos educan en el "no" de connotación negativa, en el error como algo terrible que hay que evitar... La asertividad, que tanto oigo nombrar ¡¡Y tan importante es!! A veces, se convierte en una palabra vacía más de la lista de palabras que repetimos ya sin valor alguno. Pero dejemos de nombrarla y vamos a tomárnosla en serio, a creérnosla, a usarla! Para que así la culpa no nos reconcoma. Tal vez el sentimiento de culpa es el que más desgasta, el de las mil vueltas sin dormir, el inútil que no hace bien ni a nosotros mismos ni a nadie... Si es que no, alargar ese momento no es más que un acto de cobardía.

Un beso!

Sara

Conchy P.Vázquez blogpasionporlavida@gmail.com dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. No podías haberlo expresado mejor.

Tula dijo...

Ay, Conchy, qué te pasa, mi niña? Todos tenemos malos días, así es que espero que sólo sea uno más.
Estoy de acuerdo con lo que has escrito y,dicho sea de paso, qué bonito lo has escrito, me ha encantado leerte.
Y sí, no hay nada peor que no saber decir que no, no saber enfrentarte a la gente con la verdad por delante. Al final te acabas rodeando de compromisos, malas situaciones y mentiras que se acaban descubriendo y dejándote fatal. La asertividad es la clave. Yo leí un libro para aprender a ser asertiva. No recuerdo bien si se llamaba "Tus zonas erróneas", pero me ayudó muchísimo.
Ánimo, bonita, que tienes cientos de motivos por los que sonreír.

Conchy P.Vázquez blogpasionporlavida@gmail.com dijo...

Cabréis conmigo misma. Besos guapa.

Helena Lesen dijo...

Tan importante es saber cómo y cuando decir que no, cómo no decirle que sí a todo. Esa asertividad de la que hablas.
Pero claro, todo parte de la base de tener unos principios, convicciones e ideales claros. Si no, estamos más bien jodidos...

Los malos días pasan, y por suerte, si nos ponemos a contar, son los menos. Además, a veces ayudan mucho, a reflexionar, a conocernos más y a quiénes nos rodean, etc...
Así que :)
Un abrazo enorme.